Un avance que ha mejorado los tiempos de desplazamiento, reducido los costos de los fletes y transforma la calidad de vida de los ciudadanos.
El corredor perteneciente al anillo vial del sur del Tolima, que une a Chaparral y Rioblanco, recibe una inversión cercana a los $70.000 millones y es objeto de una intervención integral en puntos críticos que en meses pasados representaban un riesgo para quienes transitaban por allí debido al volumen de transporte de pasajeros y carga, teniendo en cuenta que esta vía une, además de los municipios anteriormente mencionados, a Planadas, Ataco y San Antonio.
La secretaria de infraestructura del Tolima, Sandra Liliana García Cobas, adelantó una visita a las obras que se ejecutan. El recorrido contó con el acompañamiento del contratista del proyecto, la interventoría, delegados de Invias y los supervisores, para constatar el avance que se encuentra cercano al 90% y verificar el cumplimiento de las metas.
“Es positivo realizar esta visita, confirmar al dialogar con la gente cómo las obras de mejoramiento están de verdad ayudando a optimizar los recorridos. En este proyecto se están interviniendo 22 puntos críticos donde se estabilizó la banca, se construyeron 24 muros y se tiene pista para adelantar labores de pavimentación”, afirmó la secretaria de Infraestructura del Tolima.
Dentro de las obras se atendieron sectores como La Guanabanera, Helechal, La Barrialosa e Irco. Además, se construyó una nueva estructura en el sector de Puente Verde, reemplazando el antiguo puente sobre el río Amoyá, por uno de dos carriles, con paso peatonal, en concreto y vigas en acero, garantizando durabilidad en el tiempo.