El dengue, que hoy mantiene en alerta al Tolima, es una enfermedad viral transmitida por la picadura del mosquito Aedes aegypti. Este insecto prolifera en aguas limpias y quietas, como las que se acumulan en baldes, floreros, tapas de gaseosa o tanques mal tapados.
Expertos del Instituto Nacional de Salud advierten que el virus del dengue tiene cuatro serotipos distintos. Esto significa que una persona puede enfermar hasta cuatro veces en su vida y, en casos de reinfección, aumenta el riesgo de desarrollar cuadros graves como el dengue hemorrágico.
En el Tolima, donde Ibagué y municipios cálidos como Melgar y Espinal reportan la mayoría de casos, los epidemiólogos recomiendan tres medidas básicas:
1.Eliminar criaderos: vaciar, lavar y cepillar tanques y recipientes cada ocho días.
2.Protegerse de las picaduras: usar repelente, toldillos y ropa que cubra brazos y piernas.
3.Detectar síntomas tempranos: fiebre alta, dolor de cabeza, dolor detrás de los ojos, dolor muscular intenso. Ante estos signos, acudir al centro de salud y no automedicarse con antiinflamatorios o aspirina.
Científicos recuerdan que aún no existe un tratamiento específico para el dengue: la atención médica se centra en hidratar al paciente y vigilar la evolución de los síntomas. Por eso, la prevención sigue siendo la herramienta más efectiva para evitar complicaciones y muertes.
El llamado es claro: cada familia tolimense puede convertirse en el primer anillo de protección contra el mosquito, reduciendo el riesgo en su propia casa y en su comunidad.
