La mañana de este domingo se tiñó de dolor y repudio en Ibagué, luego de que un hombre perdiera la vida en un accidente de tránsito ocurrido en la entrada de la Ciudadela Comfenalco. A la tragedia se sumó un acto de absoluta insensibilidad que ha generado profunda indignación entre los ciudadanos.
La víctima fue identificada como Néstor Vanegas Suárez, de unos 36 años, quien chocó violentamente contra un taxi que, al parecer, hacía una maniobra prohibida en la vía. Según las primeras versiones, el conductor del taxi habría girado en U ignorando la luz roja del semáforo, lo que provocó el brutal impacto. El motociclista salió disparado y quedó tendido cerca de una buseta, con heridas que rápidamente comprometieron su vida.
Lo más alarmante del suceso es que, mientras Néstor agonizaba y aún no llegaban los equipos de emergencia, otro motociclista aprovechó el caos para acercarse y despojarlo de una cadena de oro, valorizada en cerca de siete millones de pesos. Sin mostrar un mínimo de humanidad, el delincuente huyó a toda velocidad del lugar tras consumar el hurto.
Vanegas fue auxiliado por personas que presenciaron el hecho y trasladado a la Clínica Avidanti, donde, pese a los esfuerzos médicos, falleció minutos más tarde debido a la gravedad de sus lesiones.
La Policía ya inició las investigaciones del caso y, gracias a cámaras de vigilancia instaladas en la zona, se logró identificar detalles importantes del sospechoso y la motocicleta en la que se movilizaba. Se espera que en las próximas horas se emitan avances sobre su captura.
Este lamentable episodio no solo enluta a una familia, sino que también deja en evidencia la urgente necesidad de mayor vigilancia y controles en las vías de la ciudad. La ciudadanía exige justicia, no solo por la muerte de Néstor, sino por el inaceptable acto de vileza cometido en plena escena de emergencia.
