Erika Deyanira Morales, la joven de 20 años que quedó cuadripléjica tras un brutal ataque en 2021, falleció este sábado en el Hospital San Pedro de Pasto. Su historia conmovió al país y abrió el debate sobre el derecho a una muerte digna y la búsqueda de justicia en casos de violencia.
En agosto de 2021, Erika sufrió una agresión en una discoteca de Pasto, donde dos mujeres la golpearon con una botella en la cabeza, causándole un infarto cerebral múltiple. Desde entonces, su vida cambió por completo, quedando sin movilidad y en un estado de dependencia total. A raíz del deterioro de su calidad de vida, solicitó la eutanasia, derecho que le fue aprobado recientemente.
Su familia clama justicia y exige la captura de las agresoras, identificadas como Glair Gómez y Leidy León, quienes aún no han sido judicializadas.
Erika será despedida en su tierra natal, Los Andes, Sotomayor, donde familiares y amigos le rendirán homenaje. Su historia deja una huella imborrable en la lucha por los derechos de las víctimas y contra la violencia.