En el conjunto residencial Alminar Samoa, una niña de 9 años, su hermano y dos adultos quedaron atrapados en el ascensor durante 20 minutos tras un apagón provocado por las tormentas eléctricas.
La menor, quien padece una afección cardíaca, sufrió una crisis dentro del ascensor, aumentando la angustia de su familia.
Sin embargo, la respuesta de los celadores y la administración del conjunto fue deficiente, ya que no contaban con los protocolos de emergencia necesarios para actuar en una situación como esta.
La madre de la niña expresó su desesperación ante lo ocurrido y señaló que no es la primera vez que enfrentan este tipo de fallas en el conjunto residencial.
Ante esto, surge la pregunta: ¿Quién regula las administraciones de las propiedades horizontales? Vecinos del sector denuncian que este no es un caso aislado y aseguran que hay múltiples problemas en el edificio que aún no han sido solucionados.
¿Qué acciones deben tomarse para evitar que hechos como este se repitan?