Las denuncias de posibles trashumancias electorales en el Tolima siguen aumentando, alertando el miedo a la corrupción de las elecciones regionales del 29 de octubre.
Frente a ello, el Consejo Nacional Electoral, emitió un documento en el que se inhabilitaron más de 900 cédulas para votar en Carmen de Apicalá y otras localidades que habían reportado irregularidades en dichas inscripciones.
La decisión plasmada en dicho acto administrativo deja sin efecto la inscripción de 942 cédulas realizadas en Carmen de Apicalá. Igualmente, está medida se basa en la acreditación sumaria de la no residencia electoral de los ciudadanos afectados.
Esta resolución del Consejo Nacional Electoral ha creado un debate sobre la revisión de inscripciones electorales y las funciones de los tribunales de garantías electorales a nivel municipal. Donde se argumenta que estas instancias deberían ser más activas en la verificación de las inscripciones, mientras que otros esperan que el CNE continúe su revisión utilizando bases de datos para identificar posibles irregularidades.
Esto genera dudas en la comunidad sobre la transparencia del proceso electoral y la necesidad de un control más estricto en la inscripción de cédulas de ciudadanía.
Por último, los ciudadanos afectados por esta medida tendrán la oportunidad de controvertirla ante el Consejo Nacional Electoral a nivel nacional.