Entre las ciudades más baratas, además de Ibagué, se encuentran Pasto (0,34%), Tunja (0,35%) y Popayán (0,47%).
Después de casi dos años sufriendo una elevada inflación, el costo de vida llegó a su punto máximo y sorprendentemente comenzó a disminuir. En Ibagué, que hasta hace pocos meses era una de las ciudades más costosas del país, se reportó en abril como la más barata.
El Índice de Precios al Consumidor (IPC) llegó el mes pasado a 0,78% y la variación anual fue de 12,82%; este último indicador bajó, en comparación con marzo cuando fue de 13,34%, el más alto en 24 años, también se reportó una tendencia a la baja en los precios al productor en los dos últimos meses.
Los temas que subieron los precios de la canasta familiar en abril fueron transporte (1,28%) y alojamiento, agua, electricidad, gas y otros combustibles (1,15%) y restaurantes y hoteles (1,04%). Pero, para dar un respiro a los hogares, la división de alimentos y bebidas no alcohólicas cayó 0,07%
Ibagué fue la ciudad más barata en abril (0,21%) y la variación anual llegó a 11,92%. En la baja inflación en esta capital influyó la caída de los precios de algunos alimentos que bajaron en forma considerable. Cebolla, frutas frescas, tomate, papa y yuca, productos básicos en la canasta familiar, presentaron descensos significativos.
Entre los renglones que subieron se encuentran salud (1,85%), transporte (0,84%), bienes y servicios (0,82%) y restaurantes y hoteles (0,71%). Las ciudades más baratas, además de Ibagué, fueron Pasto (0,34%), Tunja (0,35%) y Popayán (0,47%) y las más costosas en abril fueron Cúcuta (1,12%), Riohacha (0,96%), Cartagena (0,94%) y Bogotá (0,89%).
