25 familias del sur de Ibagué fueron beneficiadas de este proyecto “Canasto solidario”
Durante el primer trimestre del año 2022 la Asociación de Bancos de Alimentos de Colombia, informó que en Colombia 14.399.043 personas comen tan solo dos veces al día, una preocupante cifra en la que los Bancos de Alimentos como gestores de la seguridad alimentaria en el país, siempre adoptan medidas en cada municipio y arquidiócesis para ayudar a quienes padecen de hambre en sus núcleos familiares.
Gracias a esta obra, en el barrio la unión al sur de Ibagué, 25 familias de estrato cero y uno, fueron beneficiadas con las donaciones recolectadas a través del proyecto o iniciativa llamado “Canasto Solidario”, familias y personas que muchas de ellas sufren dificultades económicas diarias, para acceder a la alimentación básica, con relación a esto el problema que se está viviendo el cual es el alto costo en los alimentos o diferentes productos de la canasta familiar, dificultando aún más para estas familias el acceso a su alimentación diaria.
El Banco de Alimentos de Ibagué retorna con la campaña Canasto Solidario que tiene el propósito de recolectar alimentos no perecederos y productos de aseo, entre otros que serán destinados a familias vulnerables que asiste el Banco Arquidiocesano de Alimentos de Ibagué, en programas como el «Plan Padrino» y los grupos de familia.
Son muchas las historias de vida, que narran las difíciles condiciones, situaciones complejas y casos reales en nuestra ciudad de Ibagué, sobre cómo muchas familias no tienen acceso fácil a la alimentación básica diaria y por supuesto como la mayoría no cuentan con un trabajo digno que es permita cubrir las necesidades de un hogar.
Así lo cuenta María Ofelia Yate y Sixta Tulia Ferro dos de las adultas mayores beneficiadas gracias a la caridad de los ibaguereños que donaron en la campaña “Canasto Solidario” a través del centro comercial Multicentro y el colegio San Bonifacio de Las Lanzas. De este mismo modo el padre Arcesio de Jesús Álzate, resaltó y dio a conocer que “Dar de comer al que no tiene, nosotros tenemos que hacer obras de misericordia en todos los sentidos de la vida, no solamente a nivel de la evangelización, es una promesa también en la palabra de Dios, tuve hambre y me dieron de comer, vengan a mí, benditos de mi padre» Puntualizó el presbítero, haciendo referencia al mensaje de caridad que debemos aplicar desde el evangelio.